Isabelle Coelho
Algunas horas después llegamos a la ciudad, ubicada en la sierra de Río de Janeiro, y paramos en un centro de compras para tomar un café y saber más detalles de lo ocurrido. El centro estaba lleno de personas pero no había ningún ruido. Una televisión dentro de un pequeño restaurante mostraba imágenes inolvidables.
Nos acercamos a las personas. Todas miraban atentamente la pantalla y parecían confusas y desoladas. Algunas lloraban. En aquel instante descubrimos la razón. Nuestro mayor ídolo había muerto.
El periodista de Rede Globo confirmaba la última noticia y las imágenes del accidente se presentaban repetidamente. En la curva de Tamburello, en el Circuito de Ímola, en Italia, el mayor piloto de Fórmula 1 de todos los tiempos perdía el control de su coche y se estrellaba contra un muro de concreto. Médicos lo sacaban del coche y un helicóptero trasladaba al piloto hasta el hospital. Algunas horas después estaba muerto.
Era la mañana de un domingo. Sin embargo, no era un domingo cualquiera. Era el Día Internacional de los Trabajadores, un día festivo para ser celebrado por todos. Pero el Primero de Mayo de 1994 se quedó en nuestra vida para siempre como una gran tragedia mundial. Aquel hombre que tantas alegrías nos había proporcionado en los domingos a lo largo de su carrera nos hizo llorar a todos.
A pesar de haber pasado 18 años, Ayrton Senna sigue siendo un gran ejemplo de coraje y orgullo para nosotros brasileños y, sin duda, para muchos aficionados del automovilismo en todo el mundo. Con el piloto, vivimos momentos memorables y hasta hoy tenemos excelentes recuerdos.
Creo que todos se acuerdan del casco verde y amarillo, de la música tema y del piloto con la bandera brasileña al viento saludando al público en sus victorias. Su patriotismo era nuestro mayor orgullo. Imposible olvidar su gran destreza para conducir el coche bajo la lluvia. Además, a lo largo de su carrera logró más de 40 pole positions y 65 victorias, y ganó tres títulos mundiales (1988/1990/1991).
En julio de 1994, la selección brasileña de fútbol ganó el título mundial en los Estados Unidos y dedicó el tetracampeonato en homenaje al piloto, que también buscaba en aquel mismo año su cuarto campeonato mundial.
Senna era considerado “un piloto muy agresivo en las pistas y muy tímido fuera de ellas”. Pero por detrás de esta timidez Senna era un hombre de grandes acciones humanitarias, pues se encargaba de ayudar anónimamente a los niños desfavorecidos en Brasil a través de proyectos educacionales, deportivos, medioambientales y de salud. Muchos casos, por ejemplo, solamente se descubrieron tras su muerte. Hoy la Fundación Ayrton Senna, creada por su familia, sigue con este trabajo.
Desde hace 18 años los brasileños están buscando a un nuevo ídolo en la Fórmula 1. Sin duda, vamos a tener otros importantes pilotos de carreras, pero por ahora Senna es el único para nosotros. La frase que más he oído desde su muerte es que “las mañanas de los domingos jamás fueron las mismas después de Senna”.
Para disfrutar más del ídolo, pincha en esta frase y ve el documental sobre Senna
¿Es posible que surja otro ídolo de la estatura de Senna?
ResponderEliminarYo acababa de llegar a Portugal y me acuerdo que lo hice tema en las clases de Español. Hablar de alguien como Ayrton Senna, brasileño, en clase de español fue gratificante porque los propios portugueses se interesaron muchísimo por esta noticia, no sólo por ser un ícono mundial de F1 sino por su procedencia brasileña, origen que los portugueses se sienten unidos linguísticamente.
ResponderEliminar¿Conoces alguna frase célebre pronunciada por el ídolo Ayrton Senna? Aquí te ofrecemos un espacio para que nos la publiques en el blog.
ResponderEliminarAna Isabel, recuerdo que la primera persona que me habló de Ayrton (en Brasil) fue un taxista. Mientras me contaba sobre el accidente, ¡se le saltaron las lágrimas desconsoladamente! Me impresionó tanto que jamás podré olvidar aquella escena. Para un extranjero es difícil entender la pasión que sienten los brasileños por Senna, aunque, seguro, se merece todo el amor de sus compatriotas. ¡Es un amor inalterable y de todos los brasileños!
ResponderEliminarIsabelle, tu texto es muy emocionante, expresa muy bien ese amor del que hablaba. Ojalá escribas muchas más veces en "Los Insistentes". Va a ser un placer encontrarte de nuevo en estas páginas digitales...
Gracias por el texto, me ha parecido buenísimo, Isabelle.
ResponderEliminarIsabelle, ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarLa muerte de Senna es un hecho del cual nadie se olvida. Me acuerdo perfectamente lo que hacía cuando supe lo que había pasado. Sin embargo, aunque su talento fuera incontestable, también es verdad que en aquella época el riesgo era muy intenso, e incluso el propio Senna era muy activo en el intento de discutir y mejorar las condiciones de seguridad de los pilotos.
fue muy triste, estaba con mi padre y era difícil entender lo que pasaba. Fue un genio en las carreteras.
ResponderEliminarIsabelle, felicitaciones por tu artículo! Senna era y aún es un ejemplo de determinación que a todos los brasileños nos inspira y nos enorgullece. Creo que jamás nos olvidaremos de esa siniestra fecha. Yo también me acuerdo donde estaba cuándo supe de su muerte e cómo me entristecí. Me pareció terrible como si lo hubiera conocido personalmente.
ResponderEliminarIsabelle,
ResponderEliminarme gusta tu estilo conciso de periodista, aun que en el texto de Senna hay algo más que una noticia: algo personal, que habla de tus emociones. Yo me acuerdo bien de la comoción que causó su muerte, pero me parece desmedida esa reacción cuando vivimos en un país con el nível de injusticia que tiene Brasil. Cuantos inocentes mueren violentamente todos los días en nuestras ciudades? No nos olvidemos que el año 70 mientras se torturava y matava en las cárceles brasileños, la población ignorava esa barbaridad, viendo los partidos de la Copa del Mundo. todo el tiempo pendientes de los partidos de la Copa del Mundo. Reflexionemos...
Escrito por Rosa Santa Isabel
ResponderEliminarIsabelle,
me gusta mucho tu estilo conciso de periodista, aun que en el texto de Senna hay algo más que una noticia: algo personal, que habla de tus emociones. Yo me acuerdo bien de la comoción que causó su muerte, pero me parece desmedida esa reacción cuando vivimos en un país con el nível de injusticia que tiene Brasil. Cuantos inocentes mueren violentamente todos los días en nuestras ciudades? No nos olvidemos que el año 70 mientras se torturava y matava en las cárceles brasileños, la población ignorava esa barbaridad, viendo los partidos de la Copa del Mundo. todo el tiempo pendientes de los partidos de la Copa del Mundo. Reflexionemos...
Creo que hay personas inolvidables e insustituibles. Tenemos buenos pilotos, pero nadie ha sido igual a Senna. Gracias por todos los comentarios, Fatima, Belen, Ana Isabel, Hebert, Carlos, Bianca y Rosa.
ResponderEliminarIsabelle Coelho